1. Limpiar la lente del smartphone y ponerlo en modo avión para evitar llamadas entrantes y otros avisos.
2. Grabar siempre en horizontal.
3. Sujetar el smartphone con las dos manos o usar un trípode específico.
4. No utilizar el zoom mientras se graba. Se trata de un vídeo muy corto.
5. El fondo debe ser preferentemente liso con un color uniforme.
6. La luz debe proceder de la parte posterior al smartphone, procurando que nuestra propia sombra no incida en la persona grabada. Evitar los focos de luz o sol frontales que provocan contraluces y las iluminaciones procedentes del sol o focos cenitales, es decir, encima de nuestras cabezas. Las fuentes de luz laterales originaran sombras muy pronunciadas en la parte no iluminada.
7. No situar al protagonista en el centro de la pantalla. Tomar un plano de la mitad del cuerpo hacia arriba dejando un poco de espacio por encima de su cabeza. Indicarle que coloque su cuerpo recto en un ángulo de 45º entre el fondo y nuestra posición y que únicamente gire la cabeza hacia nosotros y mire a la cámara. El espacio liberado en el lateral izquierdo o derecho, al haberle solicitado que no se coloque en el centro de la imagen, puede utilizarse para pegar en la pared el logo o que luego lo puedan incorporar en postproducción.
8. Situarnos a una distancia aproximada de un metro y medio y a su misma altura para que la toma de sonido incorporada al smartphone sea correcta sin necesidad de un micrófono externo extra.
9. Si el protagonista tiene poca experiencia grabando vídeos, tranquilizarle con alguna prueba previa y pedirle que trate de explicarse igual que lo haría en un bar con unos amigos.
10. Jamás leer el texto, resta naturalidad. Se puede preparar previamente lo que se va a decir, para un minuto o menos, aproximadamente medio folio escrito. Lo importante es que utilice su lenguaje habitual, recordándole, como hemos señalado antes, que debe hacerlo de la misma manera que lo expone ante unos amigos sobre un tema que conoce sobradamente.
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